En este mismo instante alguien se despierta en la ciudad y alguien cierra sus ojos para dormir o para soñar o simplemente para no ver su realidad.
Alguien espera en una esquina, y alguien camina sin rumbo calle abajo.
Una pareja discute y un ejecutivo corre hacia su puesto de trabajo.
En este mismo instante alguien se besa bajo la tenue luz de una farola.
Alguien mata y guarda su pistola.
Una mujer enciende su gramola y aquella vieja canción no la hace sentir tan sola.
Un anciano dice hola y un recién nacido dice adiós, o hasta nunca, o hasta siempre, mientras alguien de repente siente que una vida crece en su vientre.
Una chica se despide de su novio en un andén mientras se sube en ese tren que acelera trepidante.
Alguien distante, bucea en vasos de voka, uno tras otro y otro, y ya van doce.
Una niña se mira en un espejo y apenas se reconoce.
Un marido se corre en la boca de una mujer que no conoce.
En este mismo instante un estudiante cierra un libro y sabe que lo aprendido le hace sentir más sabio y también más confundido.
Una mirada se cruza entre dos desconocidos que si se hubieran conocido serían el uno para el otro.
Alguien vende su cuerpo y alguien compra medicamentos para perder parte de él.
En este mismo instante, un chico rico se mete un pico para sentirse a salvo y un chico pobre se mete en un equipo para ser como Cristiano Ronaldo.
Alguien halla resguardo en el sueldo de un trabajo fijo, y alguien en un crucifijo y alguien en el cobijo de un cartón que sirve de escondrijo.
En este mismo instante un hijo ejemplar es feliz comiendo regaliz y una madre que sabe que su amor no será barniz ante otra cicatriz de su hijo, problemático.
En este mismo instante, alguien abre un regalo y alguien un bote de barbitúricos.
Alguien abre su mente, y alguien sus piernas.
Alguien dice, no me dejes nunca, y alguien dice, no quiero que vuelvas.
En este mismo instante, alguien da un abrazo y alguien un puñetazo.
Alguien está sintiendo los ojos del rechazo por ser demasiado oscuro, o inteligente o gordo o afeminado.
Alguien anda abandonado con la mente perdida y alguien se siente perdidamente enamorado.
En este mismo instante, un presidiario charla consigo mismo tan solitario.
Una familia numerosa se sienta a cenar y lo único que se oye es el telediario.
En este mismo instante, alguien está viviendo su más mágica experiencia y alguien sube a una ambulancia de camino a urgencias.
Alguien está dando clases, alguien tumbos.
Alguien está dando las gracias y alguien gritos de socorro.
Alguien sigue esperando en esa esquina y alguien camina sin rumbo calle arriba.
En este mismo instante, alguien se despierta y alguien cierra sus ojos.